Soy la de papel,
cenizas de un fuego soñador.
Un fuego que se ha dejado apagar;
ella de oscuridad vacia,
donde nadie pudo habitar.
Soy, con el reflejo de ella.
Ella de mejillas color de algodon,
tierna y dulce al mismo tiempo,
solo ella.
Porque antes de mi,
esta ella;
Dentro de mi soledad
la cruel comparacion de
lo que me ha dejado la mente que
me abandona.
Ella toda cubierta de sol y
rayo de luna.
La que nadie cuestiona
su calidez mental.
Y nadie advierte
el suicidio que duerme en mi rosal.
¿tengo que morir de pena
despues de ella?
Porque aun no sospechas
el lugar que
cada una habita dentro de vos.
Tus suspiros le pertenecen,
cada idea de libertad que
le da nombre a tu alma.
Que tiene de vos:
las manos,
victoriosas,
para anidar en cada latido tuyo...
por fin la gloria que
prometio sentir el corazon.
Pero no podrias callar
esta dura verdad,
que te atraganta cada vez que me nombras,
cada dia que
toco la puerta de lo desconocido,
que te posee y me mantiene
en tu prision;
encarcelada en cada enredadera
que amarra lazos
del color del sol,
en mi persona, en mi cuerpo.
¿como olvidar tu sonrisa?
¿por que hacerlo?
Porque si te vas, y tu sombra me sigue en la noche,
en el dia;
porque si me desconectas de vos;
porque si me decis que no,
que todo esto que es todo no puede seguir,
no puede romper los miedos
que nos estan espantando.
Porque sin buscarme
se que me encontras,
porque se que no sos mio,
y yo tampoco soy tuya,
porque si lo merecido nunca es milagro,
¿podre volver en mi?
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