No hay verdad para mi

No hay verdad en que el monte venga a uno ni que uno vaya a él, si las tormentas acechan tus ojos, mortifican los versos que se quedan y no se pueden ver.
Que no hay verdad ¡digo yo! en los ojos puritanos recién nacidos, en el ultimo latido de un débil corazón.
No hay verdad en los agujeros de los zapatos, que filtran aguas sucias, desechos atados al frío que no se puede abrigar.
No hay verdad en la absolución del pecado, la vida es un pecado, la muerte es una realidad.
No hay verdad en una foto y cien más, no hay pruebas en la desdicha, no hay verdad en la desdicha.
No hay verdad en la utopía ni en un fuego de pueblo, no hay verdad.
No hay verdad en los humanos, ni en los animales que son mas humanos, que aquel burgués que lame algún trasero, no por instinto, mas bien porque no quieren verdad, si no hay verdad.
No hay verdad en la palabra, que conforma realidades que no se pueden palpar.
No hay verdad en el gobierno de turno, ni el pasado, ni presente. No la hay porque no somos verdades dando manos por las calles, porque no son verdad.
No hay verdad en las extremidades de mi cuerpo, que la sangre va y viene, que la sangre guarda asesinos y ángeles, no hay verdad.
No hay verdad en soltar la lengua, amarrarla a los postes y comenzar a nadar.
No hay verdad cerrando los ojos, ni la cruz que muere en mi brazo.
No hay verdad en mi piel.
No hay verdad en la inocencia, no hay verdad en los culpables, ni en el tentado ni el tentador.
No hay verdad en la comida de la tierra, ni como se alimenta la flor.
No hay verdad en la paz, que perturba cuando llega, en ella no encuentro verdad.
No hay verdad en los caminos de pasto, en los caminos de paso, en los caminos de volar.
No hay verdad si siento, y brota el llanto, la sal no tiene verdad, hay tanto en el mar.
No hay verdad en lo profundo ni lo visible, en la oscuridad o en la luz.
No hay verdad en la percepción o la relatividad, si mi piel no degusta el tacto, si mi rostro se muda lejano, y si me ves y no estoy acá.
No hay verdad en mis versos, ni en un pensamiento, ni en la película de fondo y la tv.
No hay verdad en los jueces, ni en los fugitivos, no hay verdad en las reglas, no hay verdad en la regla.
No hay verdad en el hastío, ni en la nieve, ni en el frío, ni en como gira el mundo al rededor del sol.
No hay verdad en los actores, no hay verdad porque la vida se trata de actuar.
No hay verdad porque son todos parte de un circo virtual.
No hay verdad en un latido, ni la potencia mundial.
No hay verdad en un el matrimonio, en el beso, en el que se ríe y otorga la luz, no hay verdad.
No hay motivos para dar la vida, ni para vivirla, ni para morir.
No hay verdad, y no subestimo a nadie ni soy egoísta, porque no hay verdad para nada, nadie es verdad, no hay verdad para mi, no hay verdad para nadie más.